¡VEN, JESÚS, VEN !
Sucedió en una escuela de enseñanza primaria
La historia verdadera que les voy a contar
Que tiene visos ciertos de cosa extraordinaria...
Siendo ésta una nación de tradición cristiana,
Allá por los cincuenta en el siglo pasado,
sucumbió tristemente bajo la furia insana
de un gobierno extranjero con yugo muy pesado...
Campeó por sus fueros el rancio comunismo
Con la vieja consigna de acabar con la fe,
Arrancando de cuajo la luz del cristianismo
Sobre todo en la mente de inocente niñez.
Había una maestra atea e insidiosa
Queriendo a toda costa destruir su piedad.
Eran cuarenta niños en la edad más preciosa,
Buscando la maestra cómo hacerlos dudar.
Lideraba aquel curso niña llamada Gloria
Inteligente y sana de espíritu :un primor.
Será protagonista de aquella bella historia
Donde actuó claramente la gloria del Señor.
Con perversa intención la profesora
Llamó a Gloria y envióla al corredor
Llamándola después con voz sonora
Lo que atrajo a
Preguntóle burlona la maestra:
“¡Dime Gloria!¿Porqué hacia acá viniste?
¡Por que usted me llamó! “ _Fue la respuesta.
_¡Si al llamado viniste, es porque existes!!”
“Si llamo a Peter Pan o a Blanca Nieves,
acaso escucharán nuestro llamado?
Ciertamente que no ya que no pueden
Oirnos y venir a nuestro lado!”
“Ustedes creen que Jesús existe,
por tanto si lo llaman El vendrá.
Si al contrario no viene es que no existe!”
_Les dijo con diabólica maldad.
Los niños se quedaron angustiados
Por la insidia de aquella profesora
Y miraron con fe y esperanzados
Su lider natural, la niña Gloria.
Aquélla reaccionó con gran coraje
Para enfrentar la insidia de la atea,
Claramente entendiendo su mensaje
Dispuesta a rebatirle sus ideas.
Con voz entera les gritó a los niños:
“¿Lamemos a Jesús, pues El vendrá! “
y aquellos en respuesta, con cariño
gritaron: “ ¡ VEN JESÚS! –sin trepidar.
Fue creciendo como ola en la tormenta
Aquel grito de fe y de devoción
Esperando confiados la respuesta
Que daría Jesús el Redentor...
De pronto entre reflejos celestiales
se vio la faz sonriente de Jesús
como un sol a través de los cristales
todo su Ser nimbado de gran luz...
Fue grande el estupor de la maestra
Ante aquella evidencia irrefutable
Dando allí mismo una muy clara muestra
De que había perdido sus cabales!...
“Ha venido!-Ha venido!”-Fue su grito
repetido cien veces sin control.
Es por tanto verdad que existe Cristo!
-Y gritando salió de aquel salón...
Hubieron de internarla prontamente
en un muy conocido manicomio
habiendo desquiciado así su mente
dando al mundo muy claro testimonio...
En cambio Gloria y esos inocentes
salieron en su fe fortificados
ya que enfrentaron tan valientemente
la insidia del demonio enmascarado!...
P.Renato Alvarez Lizama.
Misionero Redentorista.
Pto Montt. 27.II-2003.