LIBRO ABIERTO.
Para el que quiera leer…
Cuenta una antigua leyenda
De un conde medio teósofo
que poseía una hacienda
Con un castillo famoso,
Y quiso experimentar
Con su hijo primogénito.
Comenzó por encerrar
A su hijo recién nacido
Y con el necio pretexto
De evitarle toda influencia,
Lo aisló en esa vivienda
Sin contacto con la gente
Sin biblioteca ni textos
Estuvo bien atendido
Sin mirar alrededor
Y sin contemplar el sol
Ni ver los campos floridos…
Al cumplir su mayoría
De edad en aquella forma
Sin ninguna ley ni norma,
Al salir aprendería
Sin más vallas ni persianas.
Abrió puertas y ventanas
Y así podría saber
Por propio conocimiento,
Lo que el mundo le ofrecía,
sin prejuicios ni conceptos
pre concebidos de vida.
Salio el joven al jardín
Del todo desconocido
Y vio el sol en su cenit
Y con el pecho oprimido
Vio aquel mundo de belleza
Y del astro la grandeza
Que iluminaba los prados
Y vio infinidad de flores
Con sus vívidos colores.
Lo árboles muy frondosos,
La cordillera nevada
Espectáculo grandioso
Que llegó al fondo de su alma…
Y mirando con gran calma
La hermosura reunida
Y por él no conocida,
Y lleno de admiración
Con alegría exclamó:
“ ¡ Que ser más inteligente
Quien plasmó tanta hermosura
Y la esparció en la natura
Para solaz de la gente! “…
La fe en el Dios Creador
Para un ser inteligente,
No se basa en la enseñanza
Ni en una leyenda rancia
Ni en ninguna tradición…
Basta con abrir la mente
A la evidencia presente
En la muda Creación
Donde está el dedo de DIOS,
Con toda su Omnipotencia.
Hay que abrir nuestros sentidos:
El ojo el tacto, el oído,
Y mirar las maravillas
Que hay a nuestro alrededor
Desde la humilde semilla
que espera hacer eclosión
hasta la luna y el sol ,
que alumbra desde la altura,
toda la fértil natura
que es un himno al Creador…
POEMA ORIGINAL.
P. RENATO ALVAREZ LIZAMA,
MISIONERO REDENTORISTA.
CONVENTO SAN ALFONSO,
CAUQUENES- CHILE.
O3- O9- 2007.